Tu cuerpo es
un universo propio, desplaza estrellas que van danzando a su alrededor.
Tu voz me
arrulla como canto de pájaro, un lago donde reposar mi espíritu tras un día de
tormentos invernales con nieve azotando con desidia la azotea desvalida de mi
cabeza, con sus ropajes abandonados a la intemperie..
Ahora ya se a
dónde conducen el brilllo de las estrellas y tu amor me impulsa a perseguirla
en los mecanismos cósmicos de las constelaciones.
El enigma que
anida en el secreto de tus labios purpura, rebosantes de dulzura, el secreto
que llega hasta tu ropa que se prende de tu encanto, el botón del chaleco, la
cremallera del pantalón, el mechón de pelo que cuelga ingrávido de tu nuca, son
la altura y el n el relieve y la hermosura. Como un árbol revestido de ramas
verdes. El pendiente izquierdo que decora un ala de tu cara no es más que un burdo
detalle en la geografía exacta de tu cara l,
Y ese cariño lleno
y contagioso que se desprende de tus manos y tus brazos, como un beso arrojado
al aire, energía llena de afecto que me envuelve, quiero devolverlo aunque sabré con certeza
que sin la misma gracia que a ti te llena.
Que bonito es
el calor tibio de tu mano, caricia permanente que me pone alas de ilusión en la
mente, dejando avenidas estrechas y vericuetos oscuros de mendicidad para
ocupar campos amplios de flores y helechos iluminados con la gracia
deslumbrante del sol, entregados uno al otro como reflejan el seno de nuestras manos
unidas
Que entre tu
voz, que me arrolle la suavidad con las que pronuncias las palabras que los
acentos de los demás hacen comunes. Esa voz llena de música y acordes mecidos
por la fuerza de las olas, que entona un canto de sirena adormecida en el ritmo
suave del oleaje. Voz que llega a la
playa con forma de notas que se las lleva el aire.
Consuelo
de mis penas, hoja verde arrancada por
el viento que entona canticos inspirados por la primavera. No te alejes de mi,
te lo suplico, ni un solo centímetro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario